martes, 25 de mayo de 2010

El gato con botas revisited

Para la Tercera Propuesta de Anónima Mente: Actualización de cuentos, mitos, leyendas...


El gato con botas apareció de un salto en la terraza del balneario, convencido de que su aterrizaje sorpresivo cautivaría a todos los presentes. No logró, sin embargo, más que miradas de reproche por parte del perro con piercing, el canario con mechas, el burro con chaqueta y el cerdo vietnamita con calzones de Calvin Klein.
En esta época del año, las mascotas en Saint-Moritz involucionan con sus amos.

6 comentarios:

  1. ¡Oh vaya, qué crueldad convertir el don de el gato en puro esnobismo!

    Me hiciste reír, pero no sólo. Voy a revisar el vestuario de mi perro.

    Un abrazo.

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  2. yo tendré que vigilar a mi gata... no se me vaya a convertir en la gatita presumida para conquistgar a tu gato.

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  3. ¡Pero cómo me gusta la reconversión de cuentos clásicos! Buenísima la idea. Me he reído con lo del cerdo vietnamita y los calzoncillos Calvin Klein... Jo, el cuento de "El gato con botas" me recuerda una colección de cuentos ilustrada que tenía y que creo que mi madre terminó regalando, porque no anda por casa... Con lo que me molaba la historia del minino del Marqués de Carabás...
    Un saludo!

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