sábado, 29 de enero de 2011

Ni hablar

Esta mañana me ha abordado un tipo extraño en la puerta del dentista. Me ha ofrecido viajar al futuro. Ha dicho que por cincuenta euros podía saltarme esta semana; amanecer el próximo sábado, sin dolor de muelas.

Le he dicho que me dejara en paz, que lo de este lunes no me lo pierdo.
Y le he dado los cincuenta euros, claro.

8 comentarios:

  1. Esto del zoom se va a convertir en una plaga. Ya es el cuarto blog en el que me lo encuentro.

    Ahora en serie, todo un detalle lo del enlace.

    Enhorabuena a Manu y a ti.

    saludos

    ResponderEliminar
  2. Buen microrrelato, con mucha moraleja, hay que disfrutar todo, sufrir con talento como dice un poema de Elizalde

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias Gabriel. La cogida que está teniendo Zoom en los blog amigos me está emocionando seriamente. Aunque solo sea por esto ha merecico la pena el esfuerzo, y sobre odo, espero que os anime a todos a seguir escribiendo, porque sois escritores de una calidad brutal. "Generación bloguer". Un gran abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Una genialidad para presentar otra genialidad. Estoy seguro Gabriel que pronto te podré seguir leyendo a tí en papel.

    Abrazos.

    ResponderEliminar
  5. Lo cortés no quita lo valiente...

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  6. En general estaría contigo, Gabriel, pero ostras, el dentista; has ido demasiado lejos.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  7. Otra buenísima presentación de Zoom, si yo fuera Manu Espada además de los nervios de hoy (lunes), estaría en las nubes por tanto amor blogesférico
    Abrazos

    ResponderEliminar
  8. Con presentaciones como ésta no va a quedar más remedio que leer el libro y seguir aplaudiéndote, Gabriel. Bravo.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar