Con este amargor tan extraño no puedo dormir. Es curioso dónde sabe el dolor. Bien atrás, a los lados de la lengua. Como la adrenalina en la boca. Pero la adrenalina sale disparada de la lengua hacia el paladar; y este amargor terrible, este cansancio en los lacrimales, va sólo hacia dentro, se absorbe, colecciona recuerdos de amigo muerto y los guarda allí al fondo, donde duele al tragar.
Ahí está. Quién me iba a decir que volvería a las andadas...
No es muy ReC, no es muy micro...
No es muy ReC, no es muy micro...
Si es que Freud se instala en cada sitio...
ResponderEliminarTú lo has dicho y tienes razón. Muy micro.
ResponderEliminarUn abrazo, Gabriel
Por lo profundo, digo
ResponderEliminarPues no sé si es muy ReC, pero es estupendo Gabriel. Muy sentido y muy micro, sin duda.
ResponderEliminarAbrazos
No sé si será muy ReC pero sí creo que es muy micro. Por lo bueno, digo.
ResponderEliminarUn abrazo y la mayor de las suertes en el concuroso
Voy a ser un poco heavy metal:
ResponderEliminar¡es cojonudo!
Es micro, es lo que tiene que ser. Punto pelota, corto y cierro.
Sigue participando Gab, andaaaaa
El micro es genial, pero la noticia que vuelves a Rec es todavía mejor. La primera vez que leí un texto tuyo fue en este concurso, luego vino abogados y hasta ahora. Así que como dice Rosana cojonudo, como el micro, como todo lo que haces, coño.
ResponderEliminarAbrazos.
Lo de siempre, Gabriel, a seguir intentándolo. Y el micro debe de ser muy propílogo, no muy ReC. No cambies de estilo para el concurso, anda.
ResponderEliminarUn saludo.
Impresionante, qué capacidad de hacerte pequeño para mirar con tu lupa ahí donde hay que mirar, ahí donde duele. Eres un sabueso de los micros.
ResponderEliminarMuy tuyo
Muy abrazo
Toda la razón para Víctor. ¿Quién quiere ser árbol en un bosque de micros y perderse, pudiendo ser senda de Propílogo?
ResponderEliminarMe encantó tu texto, Gabriel.
Como suele pasar al que llega el último, se queda con que todo lo que piensa ya está dicho. Buen micro y sin perder tu sello.
ResponderEliminarUna gran noticia tu vuelta a ReC (a ver si me animo yo también que lo tengo abandonado desde hace tiempo).
ResponderEliminarEn cuanto al relato, se me hace un tanto raro el ritmo que tiene, demasiado entrecortado...
Si la buena literatura es la que hace sentir, prueba superada. Si es un micro, si es ReC, que lo decidan los teóricos. Es genial.
ResponderEliminarAbrazos
Gabriel, lo de menos es si es muy ReC, como te han dicho, es muy Propílogo. Lo más difícil para un autor es llegar a tener un estilo reconocible, que huya de imitaciones, y tú lo tienes. Un abrazo.
ResponderEliminarAraceli, vale lo mismo Freud que Sapolsky; pero sí, eligen sitios particulares, tal vez porque amígdalas hay varias.
ResponderEliminarTor, gracias, gracias. Abrazo. Echo de menos Murcia.
Rocío, sí. Sentido sí. Con el peligro que conlleva. Abrazos.
Patricia, mil gracias. Seguiré intentando, creo.
Roxie, gracias. Todo culpa tuya. Gracias.
Agus, ReC es ReC, y si algo es, es divertido, espoleante y acicatoso. Mil gracias.
Víctor, gracias. No es mi intención de cambiar de estilo. No creo que supiera. Me refería a que hay ciertos micros que sabes que parten con menos posibilidades. Aunque confieso que no soy de analizar en profundidad qué tipo de micro entra o no entra.
Anita, garganta tenemos todos. Procuro pensar en cómo se diría para que otro sienta igual.
Muy abrazo de muy vuelta.
Alberto, puede ser que a veces los micros no me dejen ver el propílogo. Muchas gracias.
Maite, mil gracias. Voy a acabar creyendo en lo del sello.
Thanos, gracias. Vuelve, vamos. Tiene un ritmo particular, cierto. Es el mío de pensar. Cuando tengo algo así en la cabeza, funciono del siguiente modo: Sensación, Imagen, Imagen, Imagen; Reee fleee xioooón.
De verdad, pienso siempre en varios pulsos cortos y rápidos que luego analizo más despacio. Tú lo entenderás, eres ingeniero.
Jesus, reflexiono acerca de la literatura y de sentir. Dudo.
Pero gracias. A mí este micro me gusta, a pesar de que probablemente es más ensayo, más exabrupto. Puede faltarle nudo, historia... Pero me gusta.
Manu, gracias. Me creo entonces lo del estilo.
Abrazo teutón.
Y aunque no dice nada, porque se murió el otro día: Gracias, Mari, puñetero, causante del amargor. Alcalde, amigo y compañero de bar. Adiós.
Un micro para disfrutar, Gabriel. Esas frases cortas que tanto me gustan y ese amargor que tan bien has sabido transmitir. Muy bueno tu regreso a ReC.
ResponderEliminarAbrazo.
Hey, you're back! Me alegro un montón... Como hay problemas en la web de ReC no sé si este micro quedó o no finalista. ¿Cómo? ¿No lo hizo? TOOOOOOOOOOOOOONGOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
ResponderEliminar(expléndido regreso, anyway).
Besos domingueros!
:)
Ya el título es todo un acierto: por lo demás, creo que has recreado muy bien esa sensación física del dolor asentándose y expandiéndose, hasta terminar empujando al personaje al mismo desvelo: Pura realidad concreta.
ResponderEliminarAbrazos
Bien descrito el transito del dolor, duro a veces de masticar y de digerir. Me parece que es una metafora sutil y llena de matices.
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